— ¡Corten! — Creo que Dante está desesperado, no logramos terminar la primera escena íntima que tenemos que hacer Izan y yo, me siento tensa y es imposible conseguir una escena fluida de esa manera.
— Lo siento — Veo como Dante se toca la frente frustrado, Izan me observa desde la otra esquina de la sala.
— Ustedes dos — Izan y yo miramos a Dante, espero que no me pida retomar la escena ahora mismo — Vengan conmigo — Lo acompañamos a una pequeña sala donde se pueden encontrar algunos tentempiés para el refrigerio.
— Estoy cansado de esto, ustedes son excelentes actores, así que, resuelvan sus problemas o al menos lleguen a un acuerdo, pero no voy a perder tiempo ni dinero por vuestra relación personal — Nos dice sin dejarnos reaccionar.
— No tenemos una relación — Acota Izan.
— Me importa un comino, relación o no, resuélvanlo — Dante sale de la sala y yo me arriesgo a mirar a Izan.
— Él tiene razón,