– No debería ser un tema de la cual la haga sentir avergonzada. – después de unos minutos, él responde.
No le ha gustado la manera un tanto lejana a la que se ha referido Mi-suk. “Usted” en lugar de “oppa”. La chica parece haber creado una distancia la cual solo le molesta.
Parece que trata de reanimarla, mientras sus miradas se cruzan y allí esta, la evidente tensión que sus cuerpos hacen acelerarse.
– ¿Conoce a los Yokai, señorita Kim?. – dice sin romper el contacto de ojos. Mi-suk solo atiende a negar.
– Son demonios japoneses. – explica para ver algún tipo de reacción.
– Demonios disfrazados de creaturas distintas que deambulan en esta vida buscando cumplir su objetivo por el cual fueron creados. – con curiosidad, la chica le escucha atenta.
– Dígame, ¿tendría miedo si yo