—¿Qué pasará cuando seamos grandes y no estés a mi lado? —le pregunto a Milan mientras observamos las nubes tumbados en el pasto del parque mientras muestras madres hablan y nos vigilan.
—No digas tonterías, siempre voy a estar a tu lado.
—Pero en algún momento nos vamos a separar, y seremos como mamá y papá —levanto mi pequeña mano e intento atrapar una nube.
—Nunca me separaré de ti, porque me voy a casar contigo —Milan me responde soltando una risita.
—¿Lo prometes? —pregunto dudosa.
—Lo prometo, juntos por siempre —me afirma con mucha segu