Capítulo 14.

Luego de esa discusión, Matthew se sentía muy sofocado, así que salió de su despacho hacia el bosque buscando poder despejar su mente y no cometer ninguna locura.

Deja salir a su lobo para que este pueda estirar sus patas y gaste la suficiente energía.

No sabe cuánto tiempo pasa sino que siente como la serenidad, regresa a él por medio del enlace aviso a su beta que no estaría en la manada.

El tiempo pasó y ya más calmado regreso a la manada cuando ya era de noche y lo único que quería ir a tomar una ducha y poder dormir, pero sabía que tenía que revisar unos documentos.

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Al día siguiente, Matthew está esperando que el alfa de la manada contigua aparecía para discutir el tema que él presentara.

El tiempo pasa y la hora pactada llega, pero el alfa real no se puede concentrar porque desde que su rutina empezó su lobo ha estado muy inquieto.

¿Me puedes decir que te pasa?

Le pregunto ya exasperado por la actitud de este.

Pero el lobo solo se removió inquieto en su interior