Capítulo 71.
En la oficina de Luisa mientras ella se tomaba una taza de café de la más exquisita cosecha, Victoria entra como un vendaval descontrolado llena de furia.
— Tú…— dice llena de rabia al mismo tiempo que detrás de ella llega la asistente de Luisa toda temerosa, pequeña y temblorosa.
— Lo siento señora, lo siento, lo siento, le dije que se detuviera pero no me hizo caso, le dije que debo avisar de su presencia antes pero…
— No te preocupes— dijo Luisa interrumpiéndola de manera tranquila al mismo tiempo que tomaba su taza de café expreso y tomaba otro trago delicioso, ya esperaba esta intromisión. — Retírate.
— Sí señora — la joven muchacha comenzó a hacer reverencias de respeto y a caminar de reversa, en ningún momento pensaba darle la espalda a esa mujer tan agresiva que había llegado sin respetar límites.
— Continúa…— dijo Luisa con un tono divertido— yo ¿qué…?
Victoria abrió los ojos, impactada esta clase de caricatura ¿de dónde había salido? ¿Cómo era posible que le faltara el r