Capítulo trece
Enfrentamiento de tres
Abro la boca para soltar un comentario picante, pero me quedo muda en cuanto la puerta vuelve a abrirse.
No puedo creer lo que mis ojos están viendo en estos momentos. Cuanto desearía que solo fuera producto de mi imaginación o de mi ebriedad.
Tengo delante a la persona que más detesto desde hace veinticuatro horas, a esa que solo deseo que desaparezca de este mundo.
Vine a divertirme, a relajarme con el fin de olvidar su traición, marcar un nuevo comienzo y dejar todo lo malo que me ha sucedido atrás. Quería olvidar mi dolor... y me lo encuentro aquí.
Tan chulo y fresco como una lechuga, como si no hubiera destrozado mi corazón. Tal parece que no dejó una relación de tantos años atrás, que no