Narra

Elijah

Salgo de mi despacho furioso, dando un portazo. Un segundo, no pienso dejar a Samara con ese...Cachivache. Doy media vuelta dirigiéndome a mi despacho, al entrar tomo a Samara de el antebrazo y la llevo conmigo escaleras abajo.

-Elijaaah-me llama de atras-Vas muy rápido tioo-refunfuña

Me paro estático en el final de las escaleras y suelto su brazo.

-Que te paso-pregunta poniéndose delante mio.

-Tenemos que hablar Samara-le digo resignado. Ella asiente confundida, y me toma de la mano para ir a la sala de estar.

-Bien, pues habla-dice tranquila

-Escucha Samara-digo suspirando-Yo hice un trato con tu padre, el tenía una deuda con gente muy peligrosa y no la podía pagar, me pidió ayuda acepte, pero todo tiene un precio linda-suspiro otra vez mirando algún punto imaginario en la pared-Le dije que me diera algo a cambio. Yo le daba dinero el me pagaba con otra cosa más valiosa. Un día cuando fui a su oficina vi una foto tuya, te veías feliz, radiante, tu cabello caía por tu cintura y tus ojos tenían un brillo especial que me cautivo. No lo dude, eras tu, tu, te necesitaba. Le dije a tu padre que te compraría, si me dejaba comprarte yo lo ayudaba. El aceptó y no dudo en venderte a mi, si así como si fueras un objeto. Investige sobre ti, te vigilaba.

Asiento y suspiro, lo había dicho, si sigo suspirando me quedaré sin aire en los pulmones.

Ella se acerca a mi y me abraza, al principio me sorprendo un poco, pero después la rodeó con mis brazos.

-Ya estás a salvo princesa-le susurré besando su cabeza.

Ella se separa de mí y me mira a los ojos. Parece aún en shock.

-Ve a bañarte-digo cuando veo a Mike entrar por la puerta. Samara asiente y sube las escaleras.

-¿Que acaba de pasar aquí?-pregunta notoriamente confundido al ver a Samara llorando.

-Le conté-digo levantándome de el sillón

El asiente y se va por donde vino, yo en cambio me dirijo a mi despacho donde todavía se encuentra Nikolas.

-Todavía estás aquí-afirmo a ver al ver a Nikolas sentado en el mismo lugar en el que estaba cuando saqué a Samara de aquí.

Narra

Samara.

Una vez termino de bañarme me dirijo a el cuarto donde está a el armario el cual está lleno de ropa. Opte por ponerme un pantalón de jean oscuro, y como hace algo de frío una sudadera con capucha color negra, junto a unos tenis blancos.

Salgo de la habitación sin siquiera peinarme dejando mi rubio cabello secarse al natural.

-A donde vas Princesa?-pregunta la voz de Elijah a mis espaldas.

-Quiero ir a caminar por el jardín-Me doy vuelta para encararlo-Necesito procesar todo esto-El asiente y antes de seguir su camino me da un tierno beso en la frente.

Salgo de la gran mansión dirigiéndome a un pequeño banco qué hay algo alejado de la mansión, lo suficientemente lejos para que no me vean.

Siento una presencia al lado mío, pero no volteo a ver quien es. Mala idea.

La persona me tira a el pasto subiéndose sobre mi cuerpo y comienza a golpearme. Lloro, gritó, pataleo tratando de quitar el gran cuerpo.

-Maldita Zorra-dice una voz conocida. Es John.

-Déjame-Mi rostro sangraba y mi cuerpo dolía.

Él se levanta de arriba mío y me pega una patada en el estomago la cual hace que me quede sin aire.

John sale corriendo por no se donde y yo trato de recuperar el aire. Me paro apoyándome en el banco y miro a mis alrededores, esta de noche.

Camino a la mansión lentamente con las manos en mi vientre. Estoy llena de sangre.

Cuando voy a entrar la puerta se abre dejando ver a Mike, el cual abre los ojos como platos al ver mi estado. Ahogó un sollozo. Me quiero ir de aquí.

-Oh por Dios-El me adentra en la mansión-ELIJAH-grita abrazándome. No le correspondo el abrazo.

-Que pas...QUE LE PASÓ-grita corriendo hacia mi.

Mike me suelta y veo la cara de Elijah. Esta pálido.

-Que pasó Princesa?-Dice Elijah viéndome preocupado

-Me quiero ir-susurró desviando su mirada

-Que?

-ME QUIERO IR-exploto. Me alejo de el-ME QUIERO IR A MI CASA, HE TRATADO DE PROCESAR ESTO PERO NO PUEDO!-gritó

-Tranquila Princesa-dice Elijah tratando de acercarse a mi

-No-digo poniendo mis manos delante de mi-No te acerques a mi, ninguno de ustedes-señalo a Richard, Mike y Jace los cuales bajaron al escuchar mis gritos.

-Dime qué pasó-dice Elijah

-NO IMPORTA LO QUE PASÓ, ME QUIERO IR-

-Bien, te llevare a tu casa-dice Elijah tenso tomando las llaves de su auto

Un dolor se instala en mi pecho, pensé que me iba a decir algo. Por más que quiera irme algo de súplica nunca viene mal.

Sigo a Elijah hasta su auto en silencio. El camino es incómodo.

Aparcamos en mi casa. El saca su móvil y marca un número.

-Hola, te la devuelvo.-tras esas palabras caigo en cuenta que estaba hablando con mi padre.

Salgo de el auto sin siquiera volver a ver Elijah.

Todo volvió a la normalidad.

Todo acabo.