Cynthia
No puedo creer que le haya aceptado todo esto Martín, dicen por ahí que si uno quiere las cosas tiene que tener servicios y eso es lo que me va a tocar a mi sacrificarme, obvio no me voy a sacrificar con él, si no con esta relación de mentiras, no sé qué tanto me vaya a salir a mí todo esto. No me dijo a donde íbamos a ir, lo único que dijo fue que deberíamos dejar los dos el teléfono, que sería un momento para los dos y nadie podía interrumpirnos.
Vamos caminando y la verdad las veces anteriores que salíamos a montar a caballo o a ir por los viñedos, me sentía más cómoda que en estos momentos, tal vez el exceso de personas por aquí mirándonos o helecho no tengamos un tema en común para poder comenzar. Me comienza la impaciencia, No creo que vayamos a comenzar con un plan de novios de manita sudada porque primero, nunca lo he tenido y segundo nunca lo necesite.
—¿De verdad vamos a comer helado o algo así Martín? No crees que eso es algo que está un poco fuera de lugar. Ya