Después de salir del hospital Víctor noto que sus padres se miraban más tranquilos y hasta las discusiones disminuyeron, por una parte, estaba feliz de que eso pasara, pero por otro lado estaba intrigado preguntándose de porque ese cambio de actitud.
- ¿Qué haces madre? – preguntó esa mañana del sábado mirando que ella parecía estar mirando un catálogo de una tienda departamental.
- Estoy mirando algunas cosas que deseo comprar para remodelar un poco la casa.
- ¿Remodelar?
- Aja, quiero cambiar unas cosas en la casa - dijo mostrando varios muebles para el jardín – mencionó ella – e igual estaba pensando modificar la casa abandonada y…
- ¡NO! – le interrumpió.
- Víctor no le levantes la voz a tu madre – le regañó Damián.
- Perdón, es que no quiero que modifiquen esa casa…
- ¿Y porque no? – preguntó Judith – hijo te recuerdo que esta es nuestra casa y podemos hacer lo que quiera.
- Pero es que… si la encuentro…
- Hijo, te diré algo muy importante – hablo Damián frunciendo el ceño – si e