Capítulo 104. La batalla de las ruinas
Capítulo 104. La batalla de las ruinas
Narrador omnisciente:
El rastro los llevó hasta las afueras, donde la ciudad se desvanecía en silencio y ruinas olvidadas. Allí, entre calles desiertas y muros rotos, se alzaba una iglesia abandonada. Las paredes agrietadas y las vidrieras rotas parecían llorar bajo la luz de la luna.
Aylin se detuvo al frente, con el pecho agitado. El aire estaba impregnado de magia oscura, densa, como humo que se pegaba a la piel.
—Aquí estan —dijo, apenas en un susurro.
Alaric gruñó, con Ted empujando en su interior. Los dos lobos vibraban con la misma urgencia: rescatar a Clara o morir en el intento.
El grito llegó entonces.
—¡Mamá!
El chillido desgarrado de Clara resonó desde dentro de la iglesia, rebotando en los muros como un eco de dolor. Aylin sintió que el mundo se quebraba.
Iría rugió dentro de ella, liberándose con fuerza.
“Ahora. Rompe las cadenas. Nada la tocará mientras estemos vivas.”
Aylin no lo pensó más. Empujó las puertas podridas,