Mateo
Después de unos minutos volvieron a entrar, una voz se me había familiar, no sabía de dónde, era de una mujer – si lo matas ahora no te darán nada, te conviene tenerlo vivo – es el único que nos podría reconocer – ¿y que hay de los niños? Lloran, van a llorar todo el tiempo – parta estas –Noto cuando abren la pesada puerta – hasta aquí llegaste – el encapuchado se acerca a mi tratando de quitarme a los niños, uno de ellos termina cayendo de mis brazos y eso fue todo – no duraras mucho, te concedo tus últimos momentos con tus hijos – pude sentir como la sangre caliente bajaba por mi abdomen.Los niños gritaban y lloraban, los habían tratado de arrancar de mis brazos, Ostyn trataba de subir a ellos de nuevo, tambalee tratando de tomarlo, pero no pude, caí sentado con Rey en mis brazos, y Ostyn corre a los míos de nuevo.Cuesta mantener la concentración y mantenerme despierto.Los gritos afuera seguían, discutían entre ellos, ya no podía saber de q