Punto de vista de Ariana
El viaje fue silencioso y aburrido, salvo por la música a todo volumen de los altavoces. Observaba cómo el paisaje se desplegaba ante mis ojos mientras el coche avanzaba.
Poco después, el coche se detuvo junto a una gran puerta y entró tras verificar su tarjeta con seguridad. La vista que me recibió era preciosa: flores vibrantes y una vegetación exuberante que se extendía hasta donde alcanzaba la vista.
Poco después, el coche rodeó una fuente y me quedé boquiabierto ante la belleza de la villa que tenía delante. La villa se alzaba alta y majestuosa, y sus paredes blancas atraían aún más la atención. Curiosamente, casi esperaba que el edificio fuera negro, ya que Brian tenía "Black" en su nombre, pero parece que me había equivocado.
No supe cuándo el conductor se había bajado del coche, pero enseguida me abrió la puerta con una sonrisa y me indicó que saliera. Salí del coche sin apartar la vista de la casa, sabiendo que era como las que veía en las películas.