Padre e hijo. Parte 1
Padre e hijo
Leonardo Pellegrini quedó viudo cuando sus hijos tenían 15 y 13 años respectivamente.
Todo ello había dado, como resultado, un duro golpe al corazón del hombre.
Martina Pellegrini había sido su único amor. Se habían conocido cuando este comenzaba a trabajar en el Grupo Pellegrini y fue su mano derecha cuando tuvo que tomar el control del Grupo Priego y socios.
Ella había sido asistente de Franco Amato y, gracias a la chica, comenzaron a percatarse de los malos manejos que este hombre había hecho.
Martina Vani era joven, recién había concluido su secundaria nivel superior, no tuvo oportunidad de estudiar una carrera debido a los problemas económicos de su familia; Así que, con un golpe de suerte, una amiga la recomendó como secretaria para el recién llegado abogado y mano derecha del presidente.
Martina era hermosa e inconscientemente, gracias a eso le había ayudado a conseguir el puesto, Franco muchas veces quiso salir con ella; sin embargo, esta cortésmente le rechazaba.