Cap. 55
destinado al jeque
Hamad
Inmediatamente voy a la oficina donde tengo todas las llaves extra y saco la correspondiente, y vuelvo al dormitorio, abro la puerta, y ya la he levantado en mi regazo llevándola a mi cama, y definitivamente Haila está durmiendo profundamente, y por primera vez dejé mi deseo en un segundo plano, pues prefería quedarme con ella acurrucada contra mí, pero no duró mucho, y logré hacer lo que me gusta, Haila aún, solo suspiró y comenzó a acariciarme en su sueño y deliciosamente chupé sus pechos hasta que se durmió, tan dulce, delicioso y me estoy volviendo adicto, pero no quiero pensar en eso, solo disfrútalo.
Al amanecer, me despertó al sentir que me flexionaban la polla y la sacaban de mi ropa interior, pero pronto entendí por qué, Haila no pudo resistirse y me está tocando sin límite, y poco después baja su hermosa boca y comienza a chupar. mí, pasando lentamente su lengua de forma descarada en la cabeza de mi polla.
Tuve que contenerme para no aullar