96. Yo no siento nada por María.
Josefina se encontraba en ese momento devastada esa mujer estaba embarazada. Le daría un hijo a Ricardo.
Las palabras de María seguían en su mente. «No pudiste esperar a follarme en la casa, me tomaste en el despacho»
Esas palabras seguían una y otra vez rondando en su mente, sobre todo ahora que ella se encontraba embarazada. Eso hacía que sus palabras fueran ciertas. Ricardo había estado con ella, pese a que le había dicho que ya no la había tocado.
¿Acaso tenía derecho a sentirse como se sentía?
Tenía derecho a sentirse traicionada cuando ella no era más que la amante.
No quería llorar, sin embargo, de sus ojos empezaron a brotar lágrimas que ella no podía evitar soltar. Era como si su corazón volviera a romperse.
Un dolor en su pecho indescriptible la hizo llevarse las manos a su pecho, pero no solo eso sintió Josefina.
También náuseas que la hicieron caminar a un lado del jardín y ahí sacar lo que tenía en el estómago.
Rosalía salió en ese momento y la vio pálida.
Ricardo se aseg