Alexis golpeó levemente la puerta y luego de escuchar un “Adelante” abrió entrando junto a las chicas.
Buenos Días, Casandra – dijo la rubia.
El doctor aún no llega – dijo una enfermera – Pero pasen por favor –
Oh, Buenos Días Martha – dijo Caroline sonriéndole y tomando asiento.
¿Martha? –
¿Aurore? –
¿Ya se conocen? – preguntó Alexis mirándolas a ambas — ¿Me explican? –
Es que…Martha es la enfermera de Bernard—, el abuelo de Benedict e Benjamín –
¡Ah, claro! – la rubia tronó los dedos – se me había olvidado –
Es un placer volver a verla – dijo Martha sonriendo – Hacia tiempo no nos topábamos –
Cierto, igualmente me alegra –
La puerta se abrió dejando pasar al Doctor, un hombre de apariencia joven, su cabello era castaño y sus ojos eran azul marino que resaltaban con la bata blanca y el estetoscopio que colgaba sobre su cuello.
Buenos Días, es una placer volver a ver a las mujeres Hall por aquí – les sonrió – y al parecer tenemos una nueva cara –
Mire doctor, ella es Auro