—Siii, ven Ollie, vamos a jugar. —Se baja de la silla—. ¿Vienes con nosotros? No podemos dejarte sola, debemos cuidarte.
—Tengo que recoger.—Te ayudaremos, ¿Verdad, Ollie?—No, a mí no me gusta limpiar, prefiero jugar.—Ollie, no podemos dejar a nuestra novia sola.—Entonces tu la ayudas y yo voy a jugar.—No Ollie, para ser un buen novio, debemos limpiar nuestro desastre.—Entonces ya no quiero ser su novio.Los pequeños discutían y a Dione solo le causaba ternura.—Sean mi novio o no, su deber sigue siendo recoger su desorden, si no lo hacen, no pueden ir a jugar —aclara Dione.—De acuerdo. —Ollie cabizbajo comienza a recoger todo.—Verás que soy el mejor y el más rápido —dice Logan muy competitivo.—No, yo soy más rápido.Entre los tres recogen todo y al terminar, Dione los acompaña a su habitación para que estos jueguen, pero escucha tanto silencio que decide ver a los demás.—¿A dónde vas? Te guardamos un ca