El CEO salió del despacho y fue a la habitación con su esposa, Violeta sabía que su marido hablaría esa noche con su hijo, el niño desde que nació Valerio, estaba distante del padre, estaba celoso por tener que compartir a su padre quizás

— ¿Cómo te fue cariño? ¿pudiste hablar con Drago?

— Solo un poco, el sigue distante conmigo, no lo logro entender, solíamos llevarnos muy bien, ¿por qué desde que nació Valerio, cambió?

— ¿Será porque se te nota bastante lo mucho que lo quieres?

— Quiero a mis tres hijos por igual, no hago diferencias, Drago no lo entiende, hasta me reprochó por no haber estado con el cuando era pequeño, tu sabes que lo que hago con Valerio es precisamente por qué no tuve la oportunidad de estar con Drago y Dariana cuando recién nacieron, ni cuando eran unos bebés

— Se le va a pasar, verás que con el tiempo va a comprenderte — Violeta animó a su marido, estaba segura que se resolvería todo favorablemente

Al día siguiente cuando comenzaron el día, el pequeño Valeri