Andrés le llamaba a su tío, la situación estaba terrible, ¿qué cuentas le iba a dar a Fabio Mancini, de su hija? ella se le estaba desangrando en los brazos, y dudaba mucho que el pequeño bebé pudiera sobrevivir

— Andrés, ¿en dónde es que andas? ven a casa, tenemos que hablar

— Tío, ha sucedido algo terrible, Casy, ella comenzó a sangrar de repente, hilos de líquido carmesí le corrían por las piernas, la he traído al hospital ¡Joder, tío, no creo que el bebé sobreviva, ella sentía mucho dolor! ¿ahora que le voy a decir al tío Fabio? ¡yo me llevé a Cassandra de su casa, me va a matar! —;el chico se escuchaba desesperado

— ¡Hay no lo puedo creer, necesitas calmarte, Andrés, estás muy alterado, lo que le pasa a Casy, no es tu culpa, puede estar sufriendo un aborto espontáneo, eso no se puede controlar!

— ¡Yo tengo la culpa, yo la invité a salir, anduvimos caminando toda la tarde por el centro, la hice esforzarse de más, Casy no me lo va a perdonar! !soy el responsable de que quizás pier