Capítulo XVIII...
Al amanecer Elizabeth despierta, encontrando en su mesa de noche un ramo de claveles más una pequeña cajita de madera, cuando la joven abre la cajita queda en shock, al ver el lindo juego de aretes sencillos pero elegantes.
-Que lindo – viendo entrar a Carol – buenos días
-Buenos días, señorita – dando una sonrisa
- ¿Quién dejó esto?
-El amo Alex, dice que a usted no le gusta las cosas ostentosas y detesta las rosas, así que pensó en claveles
La joven se queda mirando la cajita antes de guardarla en su mesa de noche – ya veré cuando uso estos aretes – sonriendo
-Hace bien señorita, no caiga ante el amo Alex
- ¿Eh? – sonrojándose de golpe…
…
-Alex dime ¿Cuándo vas a echarla? No tolero que viva en tu casa, esa m*****a quiere alejarme de ti
-Kathy…todo es parte de mi plan…
- ¿Qué plan? Mi amor, cada día que pasa…
-Nunca me enamoraré de esa infeliz, ella ha arruinado tu vida ¿crees que podría amarla?
-Tengo miedo – recibiendo un abrazo
-Tranquila…nunca amaré a nadie más que a