Mientras miraba por la ventana, vi como empezaron a caer unas cuentas gotas de lluvia, se veia que lloveria muy fuerte, asi que me apresure a meter las flores que tenia afuera del local antes de que se estropeen, me moje un poco, cerre la puerta, no creo que con esta lluvia me lleguen mas clientes, asi que le puse seguro a la puerta, puse el letrero de cerrado.

Me disponia a comer cuando tocan fuerte a la puerta, me espante salte de mi aciento para asomarme a ver quien era la persona que estaba tocando, para mi sorpresa era mi madre. Abri rapido para que pasara y no se mojara, con ella entro un hombre corpulento, acto seguido ella me abraza como si me hubiese etrañado mucho.

-Victoria, Mi linda hija, no sabes cuanto te eh extrañado, cuando me llego el arreglo de flores y supe que eras tu la que lo habia echo sabia que tenia que venir a verte iba esperar a mandarte una nota para saber si querias verme o no. Pero no pude mas queria verte, mi niña hermosa, sabes quiero que vengas conmigo quiero que conozcas a mi esposo, el quiere conocerte.

-Madre estoy algo sorprendida, no pensé que me extrañarías, desde la última vez que hablamos dijiste que ya no querías saber más de tu pasado, supuse que eso me incluía.

-Hija se que no eh sido buena madre y de mi parte jamás hubo cariño pero siempre te quise, para mi era una vida difícil que no quería pero no por eso no te extraño, y de verdad te quiero jamás te eh escondido, mi esposo sabe de ti sabe que tengo una hija qué vive en este lugar el es el gobernador qué viene.

-Estoy algo confundida no se que decirte, de la. Nada llegas a pedirme qué me presente y que me conozca sabes que no quería que te casaras.

- Hija no quiero interferir en tu vida, tampoco quiero que sientas simpatía por mi esposo, el quiere conocerte.

-Madre no lo sé ( creo que sería bueno ir al menos será conveniente, tal vez conocer gente me ayude así como dijo brenda sacarle provecho a la situación)

- Piénsalo, te mandare a Alberto por tu respuesta.

- Esta bien lo pensaré.

- Gracias, porfavor perdoname, ya no quiero estar lejos de ti.

- Es algo que me costará trabajo creer, por la relación que siempre tuviste conmigo.

-Lo sé te dejo pensarlo, ya no te molesto me voy cuidate mucho Victoria.

-Si.

En ese momento se da la vuelta y sale del local, trae algo planeado estoy completamente segura, se que me va querer utilizar para conseguir algo, de buenas a primeras su marido ¿quiere conocerme?, se que es un viejo de 60 y tantos qué lo único que le vio mi madre fue qué la podía sacar del pueblo y darle una vida de lujo y por su vestimenta así fue.

Termino de comer, salgo para hablar con brenda ella vio que entro una mujer y un hombre a mi local estando cerrado así que supone que algo paso, le. Pediré un consejo estoy muy enojada no puedo pensar con la cabeza fría.

Entro a su local saludo, me dirijo detrás de la barra y hay estaba cortando pensacado.

-Hola Brenda, ¿puedo hablar contigo?

-Claro que si! Dame un segundo. Dejó el cuchillo,. Se lavo las Manos nos dirijimos a una mesa nos sirvieron agua y empezamos hablar.

-Bueno pues hace unos momentos hable con mi madre, llego diciéndome qué es la esposa del gobernador y el hombre quiere conocerme, que jamás me oculto el siempre supo de su hija en el pueblo de San buena aventura.

-Juró qué nunca pensé que regresaría a este lugar y se me hace tan extraño qué el marido de tu madre quiera conocerte. Eso me tiene intrigada.

-Si a mi también me deja con desconfianza.

-¿Que piensas hacer Victoria?

- La verdad mi primer pensamiento fue no hacerlo. No quiero verlos no quiero saber nada de sus vidas, viví feliz sola aquí en el pueblo si saber nada de ellos es mucho mejor así. Ahora si decido conocerlo por curiosidad o por ver que puedo sacar de provecho no se esa no sería yo.

-No no serias tu, serias más como tu madre.

Volteo a verla y lamentablemente tiene razón sería igual de interesada qué ella y yo no soy así.

-Creo vicky qué tienes que ir, pero para poner las cosas en claro con tu madre.

-Tengo miedo, de darme cuenta. Hasta donde es capaz de llegar, no creó que yo le sea de mucha ayuda.

-Te seguiré!!! Y cualquier cosa que necesites estaré a Fuera.

-Muchas gracias. Tu y José me ayudan siempre.

-Sabes que eres como nuestra hija, tal vez dios no nos mando hijos pero te tengo yo a ti.

-Gracias.

No tardo mucho en llegar aquel hombre para que diera mi respuesta.

Salí del local de brenda y le dije que si iría a la. Comida con ellos, casi al instante me entrego un paquete, al abrirlo me di cuenta que era un vestido Rojo con unos zapatos y una bolsa, junto a ellos una nota que decía que pasarán por mi mañana a las 5:00pm.

Termino mi día ya no quise abrir la tienda por la tarde estaba tan agotada mentalmente qué ya no quería saber nada, estoy muy nerviosa no se como actuar ante esa gente, para mi son extraños. Ya no pensaré más y me dormiré.