Alicia.
Subo al auto y sigo enojada.
*Quién berga secre para decirme qué puedo y que no puedo hacer, ni que fuera mi abuela, con una chingada está pero si bien pendejo, esta idiota.
*Alicia lo hiciste enojar bastante.
*Me vale una monda Liz no le pertenecemos a él entiende eso ya.
*Alicia pero yo sí le pertenezco a el.
*Pero yo no.
*Alicia somos la misma.
*Cállate ya, necesito comer algo y un trago.
Conduzco al único lugar en dónde se que seré bienvenida, me dirijo al departamento de Hugo, al llegar tocó un par de veces y me abre la puerta, me mira con sorpresa.
-Alicia eres tú.
-La misma que viste y calza, qué no te gusta cómo me veo.
-No pues este te ves muy bien, te queda muy bien el corte y el color del cabello.
-Vamos a hablar un poco claro.
Paso y me siento, le platico lo que ha pasado él está preocupado por mi abuela pero feliz por mí.
-Bueno Alicia no creo que solo hagas venido a contar