Viendo la computadora portátil, Estelle dudó por un momento y preguntó: "¿También necesitas usarla, verdad? ¿Cómo vas a hacer tu trabajo si me prestas la computadora? Puede que tenga que usarla por mucho tiempo".

"Tómate tu tiempo y no te preocupes por mi trabajo. Tengo toda la noche para hacerlo".

"¿No vas a dormir por la noche?" preguntó Estelle sorprendida.

"A menudo tengo problemas para conciliar el sueño", admitió Cristofer con una sonrisa amarga. "Mis problemas de salud mental recientes han provocado una grave insomnio".

Estelle asintió pensativamente y comentó: "No es de extrañar que te llamen Gran Demonio..."

"¿Qué?"

"Tus empleados te ven como un jefe exigente que los presiona mucho", explicó Estelle. "Cuando no puedes dormir, terminas trabajando toda la noche en la empresa, y tus empleados también deben quedarse tiempo extra".

Cristofer levantó una ceja y preguntó: "¿Te lo dijo Eva?"

"Lo mencionó cuando estábamos charlando antes. No te enojes con ella; no habló mal de ti".

"E