ENZO
Entro a mis aposentos y me encuentro a mi luna en la cama con una de mis camisas puestas y con su trasero cubierto por una braga color azul, los libros esparcidos por la cama.
* ¿Quiero morder su lindo y redondo trasero?.* Gruñe Maximus.
* Algo mejor montémosla.* Sigo mi caminó a la ducha, acabo de llegar, de hacer un recorrido por la frontera y estoy algo sudoroso, me meto bajo la regadera y siento unas suaves manos recorrer mi espalda desnuda.
— Hola.— su mano se dirige más abajo de mi abdomen en dónde masajea mi miembro, el cual responde a sus caricias.
— Ana Sofía.— gimo su en nombre.
Ella detiene su movimiento y se pone enfrente de mí.
— Odio que me digan Sofía.— me regaña.
— Me encanta tu nombre completo.—
— Quierooo que...— ella hace una pausa y los colores suben a sus mejill