Penélope. (Jueves)
— Trata de no hacer fuerza ya que tu útero va a estar un poco sensible pero es una recuperación rápida, el sangrado puede durar una horas más y listo — me da una caja de analgésicos y me manda a mi casa.
Así sin más, sin justificación, sin un seguimiento.
Como si lo que acaba de pasar fuera algo simple y sin importancia, como si la muerte de mi bebé no significara nada. Salgo del hospital y me siento en una esquina dejando salir todo mi dolor, grito y lloro, ¿Por qué? Mi bebé no tenía la culpa, él se merecía vivir, pero ya no está, ya no queda nada y cada segundo sigue pasando su vida.
No puedo calmarme, no puedo y realmente quiero pero hace tan solo unos días lo vi tan pequeño apenas comenzando a crecer y ahora ya no está, se fue y no va a volver.
¿Habrá sido mi culpa? ¿Tanto llorar, yo lo maté? ¿Es posible? Pero si yo estaba feliz, estaba contenta, emocionada, todo iba perfecto hasta que fui a ver a Demián, es su culpa, si él no me hubiera usado esto no pasab