¿¡Enserio, me dejarás así!?.
Ha pasado más de media hora y Damián no deja de darse vueltas en la cama, como si es que algo le molesta.
—Damián.
—Sí.
—Deja de moverte o dormirás en el suelo.
Mi sueño se ha ido por culpa de él.
—Es que no lo puedo creer que me vayas a dejar así —habla ya un poco molesto.
—¿Así, como? —pregunto haciéndome como que no se nada, estoy a punto de estallar a carcajadas.
—Así excitado, con mi amigo necesitado y m