EPÍLOGO.
Helena Ramírez.
— ¡Callum, Callum! — lo llamo al verlo caer, William carga a Caleb, el piso se va llenando de sangre y mi hermoso rubio comienza a cerrar los ojos, niego a lo que está sucediendo — Por favor… no me dejes… Callum, despierta — sollozo con fuerza.
— No creí que fuera tan estúpido para proteger a una campesina sin clase — miro a Axel siendo agarrados por los guardias, puedo escuchar a la policía llegar, no me levanto solo me quedo a una lado de Callum.
— Llévenselo y procuren que su condena sea la muerte — ordeno rencorosa, la cara del hombre cambio radicalmente como si no esperaba que dijera eso.
4 años después.
Respiro profundo y termino por vestir a los mellizos con ayuda de Davi, los niños cumplieron 4 años hace dos meses y como hace 4 años no celebramos sus cumpleaños desde que Callum dejó de estar presente, suspiro cansada, Davi se da cuenta y solo le sonrío.
— ¿Iremos a ver a papá? — pregunta con timidez la pequeña Soraya, Caleb me mira y ambos son la copia de su