Janice y Christopher llegaron a la entrada del estudio de su padre.

Janice llamó a la puerta.

"Adelante." Se escuchó la voz de Malcolm. Janice abrió la puerta y entró.

Malcolm estaba leyendo con varios libros apilados en la mesa frente a él. "Papá, estamos aquí".

Mientras Janice hablaba, empujó a Christopher frente a ella. "Este es Chris. Christopher Bateman. Chris, este es mi padre”.

Christopher vio a Malcolm y lo saludó respetuosamente: "Hola, señor".

Malcolm cerró el libro que estaba leyendo y miró a Christopher, con una expresión de sorpresa en su rostro.

Según Janice, tuvo bastante mala suerte. Malcolm pensó que Christopher sería un joven tímido. Sorprendentemente, parecía un emprendedor exitoso con un espíritu enérgico.

Sin embargo, Malcolm sabía que uno no debería juzgar un libro por su portada. El hecho de que se viera bien desde fuera no significaba que fuera un buen hombre.

Malcolm miró a Janice y dijo: "Janice, ¿puedes prepararnos un poco de café?"

"Okey. ”

Janice luego se