Capítulo once

No estaba de más mencionar mi terrible aspecto, ni actitud tirada al suelo, ya sabía que los partidos de futbol eran así, por eso no iba a ninguno. Estuve allí porque ellos dijeron que era importante, me vistieron para la ocasión, ¿solo para qué? ¿Verme llegando a casa empapada de refresco de alguien más, con mi vestido arruinado y una autoestima lleno de refresco? Si era alguna broma esperaba que al menos a ellos les estuviera haciendo gracia.

—Lo siento Ansel, estoy ocupado ahora, quizá lo dejemos para después—escuche decir a Austin por el celular, camine hasta él.

—Austin, estoy bien, ve con tu amigo, voy a irme sola a casa—avise. 

Tapó la salida de voz del celular—Vamos, no te dejare ir en ese estado, déjame acompañarte a casa—insistió.

—No, ya estoy grande ¿no crees?

No estaba de acuerdo, pero al ver mi cara decidida asintió—Esta bien.

—Nos vemos después, —hice ademán de querer acercarme—Mejor nos ahorramos las formalidades por hoy.

<
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo