Estoy sin aliento para cuando termino de subir las escaleras y camino rápido hacia la enfermería ubicada dentro de la casa de la manada. De guardia fuera de la habitación están el idiota 1 y 2, los mismos malditos que había asignado para mantenerme a salvo ayer. Seguro que hicieron bien su trabajo. Todavía me las arreglé para que me atrapara un brujo, apestan en lo que hacen.
Cuando me ven a mí y a su Alfa acercándonos a la habitación, enderezan ligeramente la espalda y miran hacia adelante como si estuvieran protegiendo el Palacio de Buckingham. Pongo los ojos en blanco e intento abrir la puerta, pero el maldito Chan extiende la mano para evitar que entre. Lo miro mientras cruzo mis brazos.
- Déjame pasar.
Chan mira más allá de mí, directamente a Travis para obtener la aprobación antes de permitirme entrar. Es tan frustrante que mi novio necesite dar permiso antes de