—¡Dijiste que solo era un teatro para impresionarte! ¡Que seguramente me fui a disfrutar por ahí!
Carina, el tío, se quedó sin palabras por un momento, balbuceando una excusa.
—Tras la muerte de Griselda, te confiamos la empresa. ¿Acaso no te tratamos como a uno más de la familia? ¿Por qué no te con