—No digas tonterías. ¿No hemos sido siempre amigas? Bebe un poco de este caldo. No tiene más que hierbas medicinales y sal, quizás no sea muy sabroso, pero es nutritivo. Intenta tomar algo, —respondió Ximena con una sonrisa.
Sofía, incapaz de comer, yacía en la cama, desviando la mirada mientras las