Ava Petrova
— ¿Ya tienes que irte?— Preguntó mi madre asentí — No puedes quedarte un poco más?— Preguntó — Es la primera vez que pasas todo el día conmigo y no te quiero dejar ir — Me dijo con una enorme sonrisa.
Ay mami
— Se que quiere estar con su hija pero ya culminó el horario de visitas y sabes Susana que aquí somos muy estrictos con eso— Le explicó la enfermera.
Suspiré.
Me acerqué a ella con mi cartera en la mano y besé su mejilla
— Prometo que vendré mañana a pasar el día contigo — le dije creo que durante todo este tiempo que haya estado hospitalizada jamás me detuve a pensar si ella quería compañía, yo tenía una sola meta y era hacer el dinero para pagar absolutamente todo lo que ella necesitaras pero jamás pensé que ella necesitaba mi compañía— En unos días nos vamos, solo debo culminar algunas cosas y ya — Le asegure ella asintio.
Mi teléfono vibró lo tomé pensando que podría ser Sergio, había prometido pasar por mi.
"Te he dicho lo hermosa que te ves molesta? Esos ojos