Esa noche realizamos el reconocimiento de manera rutinaria y a decir verdad no encontramos nada extraño, no esperábamos algo diferente así que volvíamos al fuerte cuando fuimos emboscados, alguien me golpeó por la espalda y caí al suelo, intenté levantarme en seguida pero cuando lo hice noté que me costaba mucho mantenerme en pie, me sentía mareada y veía borroso, de hecho durante el camino de regreso al fuerte todos nos sentíamos muy cansados, pensábamos que era por el exceso de trabajo y en mi caso asumí que era por mi embarazo.
Como les decía, intenté levantarme y busqué a Nizam por todos lados y al resto de mis compañeros, pero no los encontré. Regresé por la misma ruta que habíamos tomado al hacer el reconocimiento y cuando llegué a un claro a unos 500 metros de distancia lejos del fuerte pude verlo, estaba tendido en el suelo sangrando, el resto de mis compañeros estaban en el suelo, algunos conscientes y otros no. Me acerqué desesperadamente y entonces me di cuenta que ya no l