Capítulo 26. Desilusión.
Capítulo 26.
Desilusión.
La sensación en su corazón crece, los latidos de ambos se aceleran, se miran, se acarician, Ricardo se sostiene de la cabecera de la cama, está rechina, sus gemidos, cada beso, esas miradas, todo es indescriptible, ella se apoya de su frente, ambos respirando agitados, débiles, y una vez más, él segundo orgasmo aparece y la sensación los hace temblar a ambos, ella besa su pecho acariciando la zona con emoción.
— Bésame…— Le pide él.
Valentina lo toma de la mejilla y lo besa, Ricardo la abraza y ágilmente la acomoda sobre su pecho, sin dejar de besarla, recorre su piel con la yema de sus dedos, apretando su trasero que lo vuelve loco, lo que lo anima acomodarla para besar y morderle su glúteo, sacándole un intenso jadeo a Valentina quien lo siente nuevamente acercarse, dejando suaves besos por su espalda antes de acomodarse junto a ella, y acariciarla, recorriendo su cuerpo desnudo.
— Eres tan hermosa.— La besa sin dejarla reaccionar.
Una noche inol