—qué haces aquí—esa fue la pregunta que le hizo Andrew a rubí cuando ella entró a su habitación en la madrugada, sin una prenda que cubriera su cuerpo, tocándolo sin descaro. 

—vine a estar con quien dice ser mi esposo o acaso esto no es lo que hacen las personas casadas— le respondió ella sin dejar de repartir besos sobre el cuello de Andrew mientras despertaba en el deseo y un tanto de lujuria, puesto que él es un hombre muy activo sexualmente y nunca se ha negado a un encuentro sexual con ninguna mujer; ahora menos lo haría con su esposa la madre de su hijo por la que siente algún tipo de sentimiento que desconoce y no sabe cómo nombrarlo. 

Contrariado entre cumplir con su deber de esposo la alejaba deseando tener en su lugar a Nathalie—basta