Desperté muy desorientada, estaba en el hospital pero mis piernas las podía mover normalmente y la cabeza no me dolía nada. Me levanté de la cama y fui hacia la puerta la cual se abrió dejándome ver a un Christian, vivo y caminando, me abracé a él.
--Christian, perdóname, por favor.--Suplique con lágrimas en los ojos.--Tuve un sueño terrible.--Shhsea lo que hayas soñado no importa, me tienes aquí y no tengo nada que perdonarte.--Masajeaba mi espalda.--Por favor cuéntame que sucedió.--Christian asintió y entramos a la habitación.Abrí la boca sorprendida después de lo que me había contado Christian.--Yo no tuve nada de golpes, solo fueron unos moretones y dolor de cabeza.--Christian besó mis labios.--Gracias a Dios, por un momento pensé que jamás te volvería a ver.--Lo abracé con tantas fuerzas.--Me verás al despertar y al dormir, preciosa.--Sonreí contenta.Definitivamente ese sueño fue horrible, al parecer so