Lo veo, como me mira relamiéndose. Estoy segura, que ha imaginado otra situación.

 Me toma las dos manos, me da un tirón haciendo que salte, y me toma a horcajadas en su cintura, con mi pierna derecha envolviéndole, él me la toma por la rodilla y desliza su mano hasta casi, llegar a mi colon, suavemente.

 Me tira hacia atrás, haciendo que sienta su miembro palpitante en mi centro. ¡Estoy enloqueciendo! Me estrecha nuevamente, su pierna derecha está metida entre las mías. ¡Y ese calor abrasador, de su roce con mi coño! ¡Me tiene al punto de explotar y él lo sabe! No hablamos.

 Pero, nuestros cuerpos están ardiendo. Me hace girar a su antojo, unas veces me atrapa de espaldas, y otras de frente a él. Puedo sentir su miembro, como se roza con mi centro, con mi colon, cuando choco con su cuerpo. ¡Él no trata de disimularlo!

 ¡Est