Capitulo 1

— Mucho gusto mi nombre es ... Tatiana Hills — era mi primera mentira, mi nombre era Jimena Clark, ni siquiera sabía cómo había terminado metida en esto pero debía continuar hasta obtener una respuesta.

Llegar hasta este punto, donde tuve que decir está mentira, donde tuve que cambiar de identidad es un gran enredo es una historia que de debe relatar desde el inicio.

Mi nombre como lo dije era Jimena, yo soy huérfana y crecí en un orfanato, no sabía nada de mi familia ni de mi vida, mi origen era un misterio, cuando salí del orfanato sin saber nada de mi misma, no elegí el camino más adecuado, empecé trabajando en bares y empecé a buscar el cariño que nunca tuve y que pensé no me merecía, así lo conocí.

Jhon era un hombre lleno de poder, se encargaba de administrar los negocios ilícitos del territorio donde vivíamos, yo personalmente lo amaba y me daba la protección que siempre quise, no era amor era una codependencia al único que me brindo cariño, un gran error que acepto.

Las cosas entre los dos eran cada vez más tóxicas, más dañinas para los dos, quizás por el miedo que tenía a quedarme sola soporte, quería estar a su lado y con 22 años era la única familia que tenía.

Eso hasta que en medio de un ataque de celos casi me mata, yo nunca había sentido tanto miedo en mi vida.

Atender a hombres en un bar significa ser amable, para él era un acto irrespetuoso en su contra, me golpeó, después arrepentido me pidió perdón en el hospital pero sabía que no podía regresar a esto.

Salí más temprano del hospital sin que él me viera, era momento de salir de ese laberinto de dolor.

Busque a la única persona que conocía, quizás me podía ayudar era lo que pensaba en ese momento, se trataba de una buena amiga del orfanato, ella había tenido la suerte de ser adoptada por una familia de clase media, y me dio su dirección en alguna oportunidad que fue a visitarme por si necesitaba ayuda.

Nunca la busque porque ella tenia la vida feliz que yo deseaba pero nunca podía tener, quizás era envidia o simplemente el hecho de darme cuenta que yo no podía ser feliz.

Tatiana había logrado el éxito, una carrera en las artes, tenía un buen novio, una casa y un poco de dinero pues sus padres adoptivos habían muerto en un accidente dejandole prácticamente todo, tenía miedo de su rechazo pero su respuesta fue llena de bondad.

— Por supuesto que te puedes quedar, créeme que vas a ser de gran ayuda para mi, mi novio y yo vamos a tener un bebé y la verdad es que no vendría mal una ayuda en casa — Ella me abrazo, ella era Tatiana, la mujer que ahora debo fingir que soy.

Después de lo que sucedió, me quedé en su casa para ayudarle con los que haceres, ser su amiga y sobretodo su confidente, recuperamos la amistad perdidas de niñas.

Su novio, Patrick Holmes, era un buen hombre y debo confesar que jamás me hizo a un lado o no me miró con respeto, los dos tenían mucho cariño para dar y me daban el calor de hogar.

A través de ellos entendí que yo no vivi una relación normal con Jhon, que era algo tóxico y que me hacía daño, que para dar mi amor debía ser mucho más fuerte y sobre todo quererme a mí misma, pero era difícil después de todo lo que había pasado, de como había perdido todo, de ni siquiera recibir el cariño de mamá era difícil.

Sabía que Jhon me estaba buscando, obviamente jamas imaginó que podía estar calmada en una casa normal de los suburbios, viviendo una vida de clase media, en teoría yo era la empleada de ellos pero me trataban muy bien.

— Nos vamos a casas cuando el bebé nazca, la verdad es que no quiero salir en la foto de bodas con la pancita, además el tiene muchos asuntos que resolver con su familia — Tatiana siempre me hablaba de ese hecho como algo lejano, la boda le emocionaba pero al parecer los padres de Patrick no estaban de acuerdo con la ceremonia.

La verdad es que Patrick poco hablaba de su familia, le incomodaba demasiado el tema, parecía que huía de ellos, solo tenía una conversación con su hermano pero no se sabía mucho más de ellos.

Viví una vida cómoda, feliz, aquella casa se convirtió en mi refugio y en mi camino, entendí que podía ser diferente, que yo de verdad podía tener un final feliz.

Pero todo tenia que cambiar, cuando naces para que la tragedia te persiga es normal que esto suceda y te quedes sin suelo.

Tatiana dio a Luz a una niña, era muy bella, pensé que quizás yo también debería ser madre a pesar que Jhon fue muy claro conmigo, el nunca había querido ser padre y aún no me sentía preparada para volver a amar.

Cuando llegamos a la casa con la niña, Patrick tenía una sorpresa para Tatiana, había organizado una pequeña boda por el civil, todo perfecto para que ella fuera feliz y cumpliera su sueño de ser su esposa.

—¿Tu familia no dirá nada?— le pregunté en un susurro a el, pues Tatiana no tenía más familia que el y su bebé, Patrick era su mundo y de eso yo puedo dar certeza.

— No me importa, solo quiero ser feliz con la mujer que amo — suspiro mientras esperaba que ella llegara con el vestido blanco que había comprado para ella, era muy detallista.

La felicidad de Tatiana me parecía que era mía, quizás algún día yo podia amar de esa manera, quizás yo podia ser feliz como ella, después de una relación abusiva quieres saber si puedes ser amada te deja tan fracturada que a veces piensas que el amor no es para ti.

Decidieron ponerle a la niña Juliana, era el nombre de la mamá adoptiva de Tatiana a la que quiso mucho, la niña era preciosa y yo le jure que la cuidaría con mi vida.

Le pregunté de nuevo a Patrick por su familia un día mientras fumabamos en la terraza del edificio donde se encontraba su departamento, éramos amigos y nos entendíamos por el cariño que le teníamos a Tatiana, la amaba demasiado.

— De ellos no quiero saber nada, yo sé que no es una buena respuesta pero creeme que es lo mejor para Tatiana y para mi hija — Patrick hablaba con dolor.

Solo sabía que Los Holmes eran una familia muy rica y que él no tenía una buena relación con ellos desde hace mucho y que sabía que no aceptarían a Tatiana.

Los días pasaron, quizás un par de semanas y la bebé era saludable, pero cada mes teníamos que ir al médico para que chequearan todo.

Ese día ella se quedó en el automóvil con Patrick y yo subí rápidamente para bajar al bebé que estaba en la cuna.

— Por favor tráeme la cartera con los documentos, la dejé en la mesita de noche — me pidió con una sonrisa — Y el anillo de bodas, tengo que sentirme orgullosa de ser la esposa de Patrick Holmes — bromeó mientras le daba un beso a el.

Le entregué mi cartera para no bajar pesada con la niña, la pañalera y sus papeles, teníamos muchas confianza.

Subí por la niña, la coloque en el cargador y agarre los documentos y cartera, escuché un fuerte ruido y me asome por la ventana del edificio de departamentos donde vivíamos.

Una motocicleta se aparco cerca del automóvil y vi como empezaron a disparar dentro del vehículo, en contra de Patrick y de Tatiana.

Me congelé, no sabía que hacer mientras la niña dormía en mi regazo, nunca había pasado por una situación así de riesgosa, llegue a creer que era Jhon que me había encontrado, creí muchas cosas que hasta este momento me daban vuelta en la cabeza.

— ¡Busquen al bebé!— grito uno de ellos y patearon la puerta del edificio, querían al bebé, acabar con la familia.

Agarre fuerzas de donde no tenía y corrí por las escaleras hasta subir dos pisos arriba y esconderme en un pequeño cuarto de cuatro por cuatro donde el conserje guardaba sus útiles para hacer aseo al edificio.

Escuché a los hombres entrar al departamento, los escuché buscar por todo ese piso y subir hasta el segundo, las sirenas de la policía me salvaron la vida, gracias a ellas no perdí la vida y la niña estaba bien.

Pero seguía sin entender ¿Que estaba sucediendo?.

Baje corriendo cuando vi que era seguro, se estaban llevando a Tatiana y Patrick en una ambulancia con muchas heridas y mucha sangre.

Ese fue el día que empezó la pesadilla, de no saber en quien confiar y de amar en medio de una mentira.