Quince años después…

Si me hubieran dicho que, saber que Mi Luna estaría embarazada y por dar a luz, sería el momento más estresante de mi vida, debería habérselos agradecido por la advertencia, aunque no estoy seguro de si me habría servido de algo.

Hace varios meses, cuando nos enteramos de que Mina estaba embarazada, fue uno de los días más felices de mi vida, después de todo, habíamos decidido que ya era tiempo, que queríamos nuestra propia familia… y mi madre había estado insistiendo bastante con el hecho de que quería nietos. Digamos que teníamos cierta presión que fue la gota que derramó el vaso sobre el tema de los bebés.

No me malentiendan, no me arrepiento en lo absoluto, ni siquiera sobre el hecho de que resulta que no es solo uno el que viene, sino que son dos, que mi compañera está embarazada de gemelos, sino que simplemente estoy preocupado. No puedo evitar pensar en todo lo que puede salir mal, estoy en modo fatalista y ni siquiera la alegría de ser padre, o de estar