Capítulo 91 —El lugar está a la altura.

Narrador:

Franco se recostó en la silla, midiendo cada gesto de Renzo. Luego entornó los ojos y lanzó la pregunta como una daga.

—¿Por qué no está Vanya en esta reunión? —su voz sonó grave, cargada de lógica implacable —Si Marco estuviera aquí, estaría sentado en esta mesa. ¿Por qué no lo está ella, siendo tu mano derecha?

Renzo se tensó, sostuvo la mirada un segundo y después se aclaró la garganta.

—Porque en este momento se está ocupando de uno de los clubes. En mi ausencia, alguien tenía que tomar las riendas.

El silencio se volvió espeso. Franco lo observó fijo, como evaluando si la excusa era suficiente. Luigi, en cambio, bajó la cabeza, jugando con un anillo entre los dedos, sin pronunciar palabra.

Finalmente, Franco sonrió apenas, aunque en sus ojos no había rastro de humor.

—Está bien. Organicemos la reunión con el Diablo. —dijo, pausado —Pero quiero que Vanya también esté presente. Si es tu mano derecha, que lo demuestre en la mesa grand