_ Perdón, no volverá a pasar, actué cómo un niño pequeño temeroso de perder lo que más quiere. – respondí.
_ Nunca me perderás, amor. – sonrió y volví a besarla. – Al fin terminaremos con la prueba del pastel, supongo que es lo último que falta en la lista de tu padre, al fin podremos tener tiempo para nosotros. – mencionó.
_ Claro que sí, hermosa. Recuerda que tenemos que pasar al super de vuelta a la casa de mis padres. – mencioné sonriendo, y sí, nuestra casa ya estaba en proceso de remodelación, así que después de