El día brillaba tanto y yo estaba emocionada. Después de unos días en los que estuve muy deprimida por culpa de Louis y su afán de recordarme cosas tristes, me encerré en casa sin querer salir a ningún lado, Nero no podía dejarme sola pero tampoco podía faltar a su trabajo, tuvo que inventar una enfermedad para obtener una incapacidad, durante ese tiempo me mantuvo distraída que mi depresión paso rápidamente.
— Mira amor lo que te traje — Nero entro a la habitación con un pequeño pastel de fresas.
— ¿pastel? ─ pregunte alzándome — ¿es de fresa? — me brillaron los ojos
— Si, tu favorito actualmente — se sentó a mi lado en la cama y tomo una cuchara para acer