CID

Saco un cigarro de la cajetilla y lo enciendo. Hace mucho que no fumaba, de hecho lo había dejado. Solo que hoy todo se siente bastante tenso y tener algo que me quite la ansiedad está siendo necesario. Mantengo la mirada en el agua del río. Está fluyendo y la tranquilidad que este lugar me da no se compara con nada.

Todo está tan mal en mi vida que a veces me pregunto en qué momento todo llego a este punto. Me lo merezco, si, me lo merezco, pero… ¿hay vuelta atrás? Crecí siendo el único hijo varón del matrimonio más importante del pueblo y de la manada. Crecí pensando en que saldría de esta pueblo y conocería los lugares que me imaginaba cuando me la pasaba leyendo en mi habitación. Hasta que a los 15 años me de cuenta de que eso jamás sería posible y no porque no se pudiera, sino porque tenía cosas más importante que viajar.

Papá empezó a hablarme de la manada y enseñarme cómo se manejaba todo fuera de casa desde los 10. Era obvio que me estaba entrenan