Carlota.

-” ¿Vas a ser mi acompañante esta noche? ¿A qué se debe este increíble honor?”- me preguntó Gavin mientras nos dirigíamos a lugar de la Gala.

Este trabajo era agotador, obligarlo a salir de la casa de su amiguita, y quitarle las llaves de su Harley, fue fácil, simplemente tuve que amenazarlo con lo que más ama:

-” Confísquenla, hasta nueva orden”- les ordene a los hombres que había contratado para llevarse en un camión, y con cuidado, la única fémina a la que Gavin le es fiel, su querida Harley.

La cara de tristeza de pesado actor mientras le indicaba con la mirada que entrara en mi limusina, mientras miraba con dolor como se llevaban a su única novia en la vida, era para grabarla, y reproducirla siempre que quisiera tener algo gracioso que ver.

-” Déjate de estupideces, no me hagas enfurecer, mi idea era pasar desapercibida, como siempre, dejarte llevar a una de las de tu harén, para que te acompañara, tienes tantas, que puedes usarlas, una diferente, y como complemento