Capítulo 92 —Si me dejas cuidarte
Narrador:
La risa fue apagándose de a poco. Ya no quedaba fuego, solo brasas. El aire seguía denso de sexo, pero ahora el cansancio se había apoderado de sus cuerpos. Desirée se acurrucó contra él, sin decir nada, y por primera vez en mucho tiempo no lo hizo con tensión ni resistencia. Solo encajó.
Cedric la rodeó con el brazo, apoyó la barbilla sobre su cabeza y la mantuvo ahí, cerca. La respiración de ambos se fue calmando, aunque no del todo. Los latidos aún hablaban, incluso cuando los labios ya estaban en silencio.
Después de un rato, él deslizó la mano con suavidad hasta su vientre. La acarició como si fuera de cristal, con la yema de los dedos, como si temiera despertarlo… o romper algo. Bajó la cabeza hasta allí y le dio un beso, uno suave, casi reverencial.
—Hola, pequeño —susurró, tan bajo que fue como una caricia hablada —Soy yo, tu papá. —Desirée cerró los ojos. No dijo nada. Solo respiró hondo. —Quiero que sepas —continuó él —que estoy aqu