Capítulo 105 —¿Cuándo?
Narrador:
Silencio. Solo respiraciones entrecortadas.
—Esto no fue un juego —dijo él al fin, mirándola con esa mezcla de lujuria y ternura que la volvía loca —Me hiciste mier*da, Des, estas volviendome loco.
—Y tú a mí —susurró ella —La próxima… sin pantallas. Quiero tu lengua haciénome retorcer, no tu voz.
Él se relamió los labios.
—Hecho. Pero no me hagas esperar mucho, o voy a aparecer en tu puerta con una maldita erección y cero modales.
Ella se rió bajito y se mordió el labio inferior.
—Entonces no tardes… me encantan los hombres sin modales.
—Luego no te quejes, tu lo pediste.
Ambos seguían jadeando, con la piel perlada de sudor y el cuerpo aún tembloroso. No se decían nada, pero sus ojos hablaban. La cámara aún encendida. Sus respiraciones iban bajando poco a poco, pero la tensión emocional no cedía.
—Estoy teniendo días difíciles —susurró ella, de pronto, sin mirarlo directamente.
Cédric parpadeó. Se sentó mejor en su silla, todavía sin haberse vestido.
—