Sylvia no tardó tanto en tener sueño también. Justo cuando estaba a punto de quedarse dormida, de repente sonó su teléfono móvil.
Un mensaje de Sherry apareció en la pantalla:
—¡Sylvia, ayuda!
Sylvia se cuadró de inmediato. Ella respondió:
—¿Qué está pasando? ¿Dónde estás ahora mismo?
Sherry respondió:
—Estoy en Glanchester.
¿Glanchester?
¿El popular destino turístico junto a la Ciudad de Westchester?
Sylvia preguntó frenéticamente:
—¿Qué parte de Glanchester? ¿Qué pasó contigo? ¿Estás bien?
Después de eso, silencio nuevamente.
Sylvia la llamó de inmediato y descubrió que el número no estaba disponible. ¡El teléfono móvil estaba apagado!
Sylvia no pudo quedarse quieta después de eso. Caminó de un lado a otro frenéticamente y trató de llamar a Sherry nuevamente sin éxito.
Volvió a hojear su lista de contactos. No recordaba a una sola persona que pudiera serle de ayuda. La única persona que podía ayudarla era Odell.
Después de darle vueltas a la idea dur