Sherry se rio entre dientes y preguntó:
—Syl, ¿tú y el amo Carter han regresado de sus vacaciones?
Sylvia respondió:
—Llegamos a casa anoche.
Sherry preguntó:
—¿Has solucionado todo esta vez?
—Sí, ella me aseguró que no se repetirá.
A Sherry le pareció divertido.
—Bien.
Sylvia preguntó:
—Sherry, él siempre mantiene a Caprice a su lado. Escabullirse para encontrar al niño no es una solución sostenible. ¿Considerarías hablar con él?
Sherry contempló la escena reciente que presenció fuera del parque. Si ella no hubiera usado un doble y hubiera ido ella misma, él podría haberla confinado una vez más.
Cuando ella lo contactó la noche anterior, su tono por teléfono no fue de confrontación, pero él aun así la persiguió.
¿Podría haber alguna conversación significativa con él?
Sherry frunció el ceño y comentó:
—Entiendo, Syl. Lo reconsideraré.
Sylvia respondió:
—Está bien.
Sherry guardó su teléfono en el bolsillo.
Al otro lado de la línea, Sylvia, sit