Rodrigo regresó a la casa, Elena apenas lo vio llegar caminó a prisa hacia él.
—¿Alguna noticia del niño?
—No tía, pero hay testigos en varias casas que vieron al niño por aquí cerca del complejo, preguntó por su mamá a un portero y a otras personas.
—¿Pero a ellos no les extrañó verlo solo siendo tan pequeño?
—Pensaron que era hijo de algún trabajador que estaba cerca. —Israel había llegado poco antes que Rodrigo, se acercó y lo abrazó:
—Siento mucho por lo que estás pasando primo.
—Es horrible esta zozobra, no saber en dónde está o qué le habrá sucedido.